Titulares

Fanáticos Yankees dan la espalda a Juan Soto durante la Subway Series.






Nueva York, EE. UU. — En un ambiente cargado de emociones, el regreso de Juan Soto al Yankee Stadium estuvo marcado por un gesto simbólico de rechazo. Durante el esperado enfrentamiento entre los Mets de Nueva York y los Yankees, como parte de la Subway Series, el jugador fue recibido con una acción contundente por parte de los fanáticos más reconocidos del estadio.

Cuando Soto salió al jardín derecho para iniciar sus ejercicios de calentamiento, los “Bleacher Creatures”, conocidos por su lealtad inquebrantable al equipo, se giraron al unísono y le dieron la espalda. Este gesto, cargado de significado, dejó en claro el descontento del grupo hacia el reciente cambio de equipo del jugador.

La imagen del estadio, colmado de espectadores y emociones, captó cómo una ovación se transformó en silencio y cómo un grupo entero de fanáticos utilizó su postura para manifestar lo que sintieron como una traición. Unos meses atrás, Juan Soto vestía el uniforme de los Yankees. Hoy, regresa al estadio como parte de los Mets, y para muchos seguidores, como alguien que dejó el equipo antes de tiempo.

“No se trata solo de béisbol. Es lealtad. Es identidad”, expresó un aficionado al ser consultado por medios locales. “Darle la espalda no es solo un gesto, es un mensaje: aquí la fidelidad se valora”. Esta declaración resume el sentir de un sector de la hinchada que, más allá de los resultados deportivos, prioriza el compromiso emocional con el equipo.

A pesar de este recibimiento frío y cargado de simbolismo, Soto se mantuvo sereno. Completó sus rutinas previas al juego sin interrupciones ni respuestas hacia el público. En un momento, se le observó mirar brevemente hacia las gradas, en lo que pareció ser un gesto de reconocimiento ante lo que estaba ocurriendo.

Este episodio, aunque se desarrolló fuera del terreno de juego, puso de manifiesto la dimensión emocional que rodea al deporte. Las decisiones de los jugadores, el impacto de sus acciones pasadas y el vínculo con la afición a menudo pesan tanto como sus logros dentro del campo.

Al ser consultado al final del encuentro si era la vez que más abucheos había recibido, Juan Soto respondió con humor: “I think so. They were really loud”.

El momento, registrado por distintos medios y compartido en redes sociales, se suma a los episodios que reflejan cómo el deporte profesional, además de cifras y resultados, es también una historia de lealtades, decisiones y reacciones apasionadas.

No hay comentarios.