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Muere alto jefe del Ejército ruso tras ataque con coche bomba en Moscú.




Moscú.– Un alto mando del Ejército ruso murió este lunes tras un ataque con coche bomba ocurrido en la capital rusa, un hecho que ha generado conmoción dentro de las Fuerzas Armadas y ha elevado las tensiones en medio del conflicto entre Rusia y Ucrania.

La víctima fue identificada como el jefe de operaciones del Estado Mayor del Ejército ruso, quien falleció cuando un artefacto explosivo detonó en un vehículo estacionado en un aparcamiento del sur de Moscú. Según las primeras informaciones, la explosión se produjo en el momento en que el oficial se aproximaba al automóvil, causándole la muerte de manera inmediata.

Equipos de emergencia y fuerzas de seguridad acordonaron la zona, mientras especialistas en explosivos iniciaron las labores de investigación. El Comité de Investigación de Rusia abrió un proceso penal por asesinato y uso ilegal de explosivos, calificando el hecho como un atentado planificado.

Sospechas y contexto

Aunque hasta el momento no se ha confirmado oficialmente la autoría del ataque, fuentes cercanas a la investigación indicaron que no se descarta la participación de servicios de inteligencia extranjeros, en particular en el contexto de la guerra en Ucrania. Por su parte, Ucrania no ha emitido comentarios oficiales sobre el incidente.

Este atentado se suma a una serie de ataques similares registrados en el último año contra figuras militares rusas, lo que ha encendido las alarmas sobre posibles operaciones encubiertas dentro del territorio ruso.

Reacciones oficiales

Autoridades rusas condenaron el ataque y prometieron llevar a los responsables ante la justicia. Desde el Kremlin se destacó que el asesinato de un alto oficial militar representa un grave desafío a la seguridad nacional, y se anunció el refuerzo de las medidas de protección para altos funcionarios y mandos castrenses.

Analistas señalan que este suceso podría tener repercusiones significativas tanto en el ámbito militar como político, intensificando el clima de confrontación y desconfianza entre Moscú y sus adversarios.

Mientras avanzan las investigaciones, el país permanece atento a nuevos detalles sobre un atentado que marca un nuevo capítulo de violencia en el conflicto que sacude a la región.

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